Los pacientes con Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) presentan una conectividad reducida entre la parte más anterior de la corteza orbitofrontal y las regiones inmediatas circundantes, mientras que la parte posterior de esa misma corteza muestra conectividad reducida con otras áreas corticales más distantes.
Del mismo modo, todas las cortezas sensoriales primarias (somatosensorial, visual, auditiva, gustativa y olfativa) muestran una disminución en la conectividad tanto con grupos neuronales cercanos como lejanos. “Este hecho podría explicar la presencia de pensamientos intrusivos —absurdos e indeseados— en esta población de pacientes como consecuencia de un filtrado sensorial ineficaz, que impediría descartar estímulos irrelevantes”.
Investigación: Pujol J, Blanco-Hinojo L, Maciá D, et al. Mapeo de los Cambios en la Estructura Funcional de la Corteza Cerebral en el Trastorno Obsesivo-Compulsivo. Cerebral Cortex. 2019;29(11):4753-4762. doi:10.1093/cercor/bhz008
Alteraciones cerebrales en el Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC)
El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) es una condición mental compleja que se manifiesta de múltiples formas y se caracteriza por la presencia de pensamientos intrusivos, absurdos e indeseados que causan un elevado nivel de angustia en los pacientes. Estos pensamientos, a menudo extraños y fuera de contexto, son característicos del TOC y pueden derivar en comportamientos compulsivos como intento de aliviar la ansiedad que generan.
Las raíces de los pensamientos intrusivos en el TOC están profundamente vinculadas a alteraciones neurobiológicas específicas en el cerebro. Los estudios de neuroimagen han ofrecido importantes hallazgos sobre las regiones cerebrales afectadas por el TOC. Entre las principales alteraciones destacan:
- Circuito Córtico-Ganglio Basal: Este circuito es clave para entender el TOC. Existen evidencias de hiperactividad y desregulación en esta red, implicada en el procesamiento de información y en la regulación de la conducta. Las regiones involucradas incluyen la corteza cingulada anterior y el núcleo caudado.
- Corteza Prefrontal: Región fundamental para la planificación, toma de decisiones e inhibición de respuestas. En el TOC, esta área muestra disfunciones que podrían contribuir a la incapacidad de controlar los pensamientos intrusivos y la necesidad compulsiva de realizar rituales.
- Circuito Tálamo-Cortical: El tálamo, que actúa como un centro de retransmisión sensorial y motora, presenta conexiones disfuncionales con la corteza cerebral en personas con TOC. Esta alteración puede afectar la capacidad para filtrar información irrelevante.
- Sistema Límbico: Este sistema, clave en el procesamiento emocional y la memoria, también participa en el TOC. Por ejemplo, la amígdala podría estar implicada en la intensa ansiedad asociada a los pensamientos obsesivos.
- Serotonina y Transportadores de Serotonina: La neurotransmisión de la serotonina se ve alterada en el TOC. Niveles bajos de serotonina y disfunciones en sus transportadores se han relacionado con los síntomas del trastorno, incluidos los pensamientos intrusivos.
Aunque el conocimiento sobre las alteraciones cerebrales en el TOC ha avanzado significativamente, aún se requiere mayor investigación para comprender completamente su complejidad. Sin embargo, los hallazgos actuales ofrecen una base sólida para el desarrollo de nuevas terapias y tratamientos más eficaces para quienes conviven con esta difícil condición.
Nota: Este texto es un resumen con fines informativos. La ciencia está en constante evolución. Para un diagnóstico preciso o tratamiento del TOC, siempre consulte a un profesional de salud mental calificado.